El turismo centrado en las zonas de producción de vino en España sigue creciendo a paso redoblado. Conocida como enoturismo, esta actividad se ha convertido en una de las más solicitadas por los españoles que desean observar en primera fila cómo es la vendimia, el proceso de elaboración y participar en diversas catas de esta singular bebida.

Según cifras aportadas por la Asociación Española de Ciudades del Vino (Acevin), en el 2016 casi 3 millones de turistas participaron en rutas para disfrutar tanto de las bebidas como de los paisajes.

Lo que se traduce en un incremento del 20% en comparación con el año anterior. Esta actividad ha permitido a las bodegas y a los museos que están adheridos a las Rutas del Vino de España generar una facturación global por el orden de los 54 millones de euros, lo que significó un aumento del 11%.

En el país se produce vino en las 17 comunidades autónomas; no obstante, hay regiones vitivinícolas que son más conocidas que otras, como es el caso del Penedès, Utiel-Requena, Priorat, La Rioja, Ribera del Duero, Navarra o Jerez.

Además, según la Organización Internacional de la Viña y el Vino, la nación se sitúa como la tercera productora mundial de vinos, solo por detrás de Italia y Francia, pero por delante de importantes productores como Estados Unidos, Australia, Argentina y Chile.

La Rioja, región emblemática

La cuna de esta cultura enológica ha sido la Rioja Alta, que sigue ganando el reconocimiento mundial como el lugar por excelencia para la producción de vino en España.

La región está repleta de municipios y comarcas en las que el vino es el protagonista de la película. Durante el invierno, incluso la nieve y el frío brindan un carácter especial al lugar.

En las localidades se pueden encontrar reconocidos vinos de reserva, crianzas y de año, lo que representa un buen síntoma del sector, que se perfila como uno de los más importantes de la economía local.

La Rioja es la zona que lidera las ofertas para los turistas del vino, que se ven atraídos por las visitas a las bodegas, las rutas, paisajes de los viñedos, los atractivos alojamientos y la rica gastronomía.

Para impulsar este tipo de experiencias, el programa Rutas del Vino de España ha establecido diversos recorridos a través de los viñedos y todos los lugares de interés que guardan relación con la industria del vino.

En el caso de La Rioja, existen 3 rutas: la ruta del vino de Rioja Alta, la ruta del vino de Rioja Alavesa y una tercera opción que se ha comenzado a gestar en la parte más oriental y que ya cuenta con el respaldo de más de 60 empresas.

Sobre la distribución y comercialización de vinos en España, los especialistas de Vinos y Licores Cutanda, una empresa familiar con más de 30 años de experiencia en el mercado local, comentan que la historia de la industria del vino comenzó siglos atrás con la fundación de sus bodegas más antiguas.

Desde su página web vinoscutanda.com, los expertos de Vinos Cutanda han hecho un repaso por la rica historia que guarda la cultura enológica del país. Los profesionales detallan cómo ha crecido la producción con el transcurso de los años, lo que ha dinamizado la industria y convencido a los consumidores a la hora de comprar un vino.

Consumo de vino en alza

Un informe difundido por el Observatorio Español de los Mercados del Vino revela que el consumo de esta bebida en España registró un aumento en el 2016, tras experimentar una disminución durante décadas. El incremento pasó del 2,5% al 4%.

La recuperación en el consumo obedece a 3 motivos: a las ventas en los canales de alimentación, ventas directas online y en las bodegas, seguidas de la restauración.

Los especialistas explican que el incremento también se debe a la recuperación económica, a una mayor variedad en la oferta, más información disponible y el cambio en la imagen del vino con un etiquetado más cuidadoso.

Con esto como escenario, las organizaciones locales informan de que el consumo per cápita de vino en España se sitúa actualmente en unos 21 litros. Cifra que esperan aumentar en los próximos años con nuevas estrategias, para enamorar a las generaciones más jóvenes.

El sector produce una media de 42 millones de electrolitos cada año. De ese total, unos 22,65 millones fueron exportados a diferentes mercados internacionales que siguen demandando todas las variedades del vino español.

La industria del vino en España se mantiene consolidada como una de las más importantes del mundo. La meta es impulsar el consumo interno, incentivar el enoturismo en otras regiones y seguir fortaleciendo las cifras de exportación hacia nuevos países.